viernes, 14 de febrero de 2014

EL BAILE, COMO EJERCICIO

ESTE TEMA ME ENCANTA, PUES EL BAILAR LO LLEVO EN LA SANGRE Y ME ENCANTA, GRACIAS A DIOS A MI ESPOSA TAMBIEN, DISFRUTEMOS DEL BAILE NO IMPORTA LA EDAD.

Baile
El BAILE como tal existe desde hace muchos años y de hecho cada nación o incluso región tiene algún tipo de baile propio. La evolución del ser humano va acompañada del baile que ha ido en paralelo a ésta. Hay bailes más movidos y los hay que lo son menos, pero al fin y al cabo todos implican un movimiento corporal, que es una premisa importante para conseguir un buen estado de salud.
Tanto músculos como articulaciones intervienen en las distintas coreografías que forman cada modalidad de baile, pero si hay un órgano que sale muy beneficiado, éste es el corazón, junto con los vasos sanguíneos; en definitiva, el sistema cardiovascular.
AMIGO DEL CORAZONLos grandes beneficios para la salud, en general, los proporcionan las actividades cardiovasculares (andar, correr, nadar…..) y BAILAR se encuentra también entre ellas. Cuando una persona baila está sometiendo a su cuerpo a un estímulo que hace que el corazón tenga que trabajar para bombear la sangre que requiere el resto del organismo para moverse. Ese estímulo activa al corazón que, al ser un músculo, necesita moverse para no atrofiarse. Según el tipo de baile, el estímulo será mayor o menor y el músculo cardíaco deberá trabajar en mayor o menor medida.
Hay que buscar, pues, aquella modalidad que se adapte mejor a las condiciones individuales ya que el baile está recomendado a cualquier edad y para ambos sexos.
EL MEJOR BAILE A CADA EDAD
  • Para las edades más tempranas el ballet o modalidades más movidas son ideales para empezar a trabajar la coordinación. En estos casos se suele empezar como un juego para acabar siguiendo una coreografía. Se busca desarrollar las cualidades motrices y también, por qué no, que se siga cierta disciplina. A medida que el cuerpo se va desarrollando el abanico se amplía muchísimo. 
  • Los jóvenes suelen decantarse por bailes con mucho ritmo y con un elevado nivel de desgaste energético y exigencia cardiovascular. Es el momento para disfrutarlo ya que el organismo está en pleno rendimiento y, además, cuanto más lo cuidemos ahora mejor estará en el futuro. Los músculos se trabajarán para ser un refuerzo perfecto para el esqueleto, además de mejorar en cuanto a flexibilidad. Los huesos, por su parte, estarán ganando en fortaleza.
En el caso de los adultos las recomendaciones se centrarían bailes que no sean excesivamente exigentes para el corazón y la musculatura. De todos modos, si a edades más tempranas se ha bailado, el adulto puede seguir haciéndolo adaptándose a las características del momento. Evitar excesivos saltos o movimientos bruscos es una manera de adaptarse al baile pero hay que seguir disfrutándolo. Sentirse joven es parte de la felicidad del ser humano y si el baile lo permite, mejor que mejor.
Para los más séniors pero que conservan aún el espíritu de bailarín o bailarina también existen diversas posibilidades a su alcance. Las archiconocidos bailes de salón suelen ser las estrellas entre este colectivo. Las salas de fiestas están llenas de “reyes y reinas” en las pistas de baile. Es una actividad más que recomendable. Con ello se consigue dejar de lado el sedentarismo y “atacar” a todos aquellos factores de riesgo que ponen en “jaque” a la salud sobretodo de los más mayores.
Quien baila tiene menos posibilidades de tener elevados los niveles de colesterol, triglicéridos y azúcar en la sangre. Conseguirá cansarse menos cuando sale a pasear o incluso a la hora de subir una cuesta. Para mujeres postmenopáusicas, es una manera de luchar contra la osteoporosis.

miércoles, 12 de febrero de 2014

SIETE COSAS QUE NO SABIAS SOBRE EL BAILE



 : Danza Social Foto de archivo




1.Los bailarines también entrenan mentalmente Hace unos años, un equipo de investigadores de la University College London (UCL), en Reino Unido, descubrió que en nuestro cerebro existe un "sistema espejo" que responde de forma diferente cuando vemos a un bailarín hacer una pirueta según estemos entrenados o no para ejecutar ese movimiento. Las neuronas que lo forman están "afinadas" para el repertorio de movimientos propio de cada individuo. Una de las principales conclusiones del hallazgo, según sus autores, es que atletas y bailarines podrían continuar entrenando mentalmente cuando sufren una lesión física.


2.Los genes del baile
Tras analizar el código genético de distintos profesionales de la danza, en la Universidad Hebrea de Jerusalén han encontrado diferencias importantes en dos genes: el gen encargado de codificar el transportador de la serotonina, un neurotransmisor que entre otras cosas contribuye a la experiencia espiritual, y un receptor de la hormona arginina-vasopresina, que según estudios recientes modula nuestra capacidad de comunicación social. "Ambos son genes vinculados al aspecto emocional del baile" puntualiza Richard Ebstein, coautor del estudio.


3.Inteligencia relacionada con el movimiento corporal Junto a la inteligencia lingüística, la musical, la lógica/matemática, la espacial, la intrapersonal, la interpersonal o la espiritual existe una inteligencia corporal o cenestésica, que puede definirse como la habilidad para controlar los propios movimientos corporales y manipular objetos con cierta maña. Este tipo de inteligencia, según Howard Gardner, es la que está detrás de la capacidad del bailarín para "ver-y-hacer", transformando una imagen visual dinámica o ciertas órdenes sonoras en una acción física.


4.Bailar samba debería formar parte del entrenamiento de los futbolistas Un equipo de investigadores japoneses ha llegado a la conclusión de que bailar samba, una danza brasileña con raíces africanas, favorece un control del cuerpo que puede mejorar las habilidades motoras en actividades tan dispares como tocar un instrumento de percusión o jugar al fútbol. Según el doctor Tomoyuki Yamamoto y sus colegas del instituto Avanzado para la Ciencia y la Tecnología de Japón, "ejercitar el movimiento de las caderas es esencial para mejorar la movilidad de otras zonas del cuerpo", posiblemente debido a la proximidad de esta zona a nuestro centro de gravedad corporal. Por eso decidieron probar a entrenar a jugadores de fútbol bailando samba. El resultado: una importante mejora del rendimiento deportivo. Lo próximo, dice Yamamoto, será probar los efectos de otros bailes en los deportistas.


5.Nuestros antepasados también bailaban Geoffrey Miller, psicólogo evolutivo de la Universidad de Nuevo México (EE UU), cree que "música es lo que ocurre cuando un simio antropoide tropieza y entra en el paraíso evolutivo de la selección sexual desbocada, de la exhibición acústica compleja". El autor cree que cantar y bailar formaban un conjunto de rasgos indicadores para nuestros antepasados cuando escogían pareja, especialmente para las hembras. El baile y el canto ponían de manifiesto la buena forma física, la coordinación, la fuerza y la salud.


6.El baile puede ser terapéutico Científicos de la Universidad de Missouri (EE UU) han llegado a la conclusión de que bailar puede ser terapéutico al alcanzar la tercera edad, ya que mejora considerablemente el equilibrio y reduce el riesgo de caídas y lesiones.
 
7.Existen coreografías basadas en las matemáticas del caos En los años noventa una estudiante de ingeniería del popular Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), Diana S. Dhabi, decidió utilizar las matemáticas del caos para componer música a piano. Siguiendo su ejemplo, los científicos norteamericanos Elizabeth Bradley y Joshua Stuart han creado recientemente varias secuencias de movimientos basadas en el caos partiendo de piezas clásicas. Incluso han desarrollado una versión caótica del popular baile asociado a la canción Macarena. Y todo a través de un software original desarrollado por ellos mismos, el Chaographer. El resultado es una danza original y "agradable para la vista", aseguran. Además de que ?enseñar estos resultados en clase es una forma muy efectiva de motivar a los estudiantes para que aprendan más sobre las matemáticas del cuerpo rígido y el caos?.

sábado, 8 de febrero de 2014

BENEFICIOS PSICOLOGICOS Y SOCIALES DEL BAILE







 : un hombre caucásico y el rock mujer bailando en el estudio de silueta aislados sobre fondo blanco Foto de archivo



      
  • Al bailar nuestra mente se concentra en memorizar y realizar adecuadamente los pasos, que nos olvidamos de los problemas y por el contrario, nos relaja y llena de energía.
  • La alegría que brinda la música y la destreza de sus movimientos animan el espíritu y obligan al cuerpo a moverse.
  • Es Diversión y placer al tiempo que se aprende.
  • Es un pasatiempo que estimula la creatividad.
  • Eleva tanto la autoestima, que nos hace sentir triunfadores.
  • Ayuda al desarrollo de la disciplina y el autocontrol.
  • Mejora el poder y la capacidad de seducción.
  • Se desarrolla la sensibilidad de la persona, al conocer un nuevo arte.
                                        Beneficios sociales que proporciona el baile

  • Es un pasatiempo desafiante para cualquier persona, sin importar su edad o sexo
  • El baile nos da la oportunidad de interactuar y compartir un hobby con un compañero.
  • Permite socializar, conocer gente.
  • Nos abre a nuevas experiencias.
  • Ayuda a vencer la timidez.
  • Se desarrolla la cultura musical.
  • Es un punto a tu favor al momento de salir a bailar a una discoteca, boda o cualquier otro evento.
  • Reconocimiento por parte del sexo opuesto, lo que provoca mejores relaciones.
  • Actividad que se presta para establecer una relación romántica.